Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, nuevamente defendió a Hugo López-Gatell, subsecretaio de Salud federal, acerca del manejo que ha tenido de la pandemia de COVID-19 en el país.
En la conferencia matutina llevada a cabo en Palacio Nacional, el mandatario mexicano aseguró que no se puede culpar a López Gatell por las muertes del COVID-19 en México, pese a que ya tienen denuncias penales por su actuar.
“Se me hace una gran injusticia, una campaña de desprestigio porque… ¿qué va a hacer el ministerio público o el juez? Pues no es nada más el doctor Hugo (López-Gatell), es el presidente, es el Secretario de Salud (Jorge Alcocer), todos iríamos a la cárcel. Todos somos Hugo“, argumentó.
“Pero todo tiene que ver con la politiquería, entonces eso es lo que quería decir y advertir aunque es muy obvio de que van a seguir todas esas campañas de desprestigio, de mentiras, de calumnia en la mayoría de los medios de información, es que yo creo que vamos a tener que refrescar información, ¿cómo se dice en el periodismo? Refritear para sacar información de cuánto recibían los medios y ahí nos vamos a quedar nada más en publicidad, porque si nos metemos a qué otras prebendas recibían”, puntualizó.
El jefe del Ejecutivo federal reiteró que México se encuentra entre los tres países que más vacunas ha aplicado en el mundo, además de que por el mecanismo Covax de la ONU llegarán un total de 18 millones de dosis del fármaco anticovid.
México registró este lunes nueve mil 242 nuevos contagios de COVID-19 para llegar a un total de cinco millones 160 mil 767 casos, además de 206 muertes para totalizar 309 mil 752 decesos, informó la Secretaría de Salud.
En México, en los reportes de domingo y lunes las cifras bajan debido al procesamiento de información del fin de semana y antes de estos días venía de jornadas con más 30 mil y 40 mil casos.
Con estos datos, México es el decimocuarto país en el mundo en número de contagios confirmados y es el quinto con más decesos por esta causa, por detrás de Estados Unidos, Brasil, India y Rusia, según el recuento de la Universidad Johns Hopkins.