La congresista trumpista Marjorie Taylor Greene fracasó este miércoles en su intento de destituir al presidente republicano de la Cámara de Representantes estadunidense, Mike Johnson, a quien acusó de haber apoyado la ayuda a Ucrania.
La congresista, muy cercana al ex presidente y candidato electoral Donald Trump, acusa a su colega de partido de «traición» y de financiar «guerras eternas».
La moción de destitución fracasó rápidamente, porque la mayoría de los demócratas y republicanos votaron a favor de mantener a Johnson en el cargo.
Trump reaccionó en su red social: «Adoro a Marjorie Taylor Greene (…) pero actualmente no estamos en posición de votar una moción de destitución» porque los republicanos tienen una mayoría muy estrecha en la Cámara, escribió.
El apoyo a Kiev ha sido objeto de debates muy acalorados en el Congreso estadunidense y muchos republicanos pidieron que no se desembolsen más fondos para el país, en guerra contra Rusia.
Después de meses de dilación y presión de los demócratas y de sus aliados en todo el mundo, Mike Johnson apoyó el paquete, lo que enfureció a la derecha radical.
Cualquier congresista puede presentar una moción para destituir a su presidente.
La amenaza de moción recuerda lo sucedido al predecesor de Johnson.
El ex presidente de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy fue destituido hace unos meses cuando un grupo de trumpistas lo acusaron de haber concluido un «acuerdo secreto» con los demócratas sobre Ucrania, en medio de negociaciones presupuestarias.