Según el diario “The Sun”, la reina Elizabeth II quería pasar su cumpleaños en su casa de campo en Sandringham, pues el lugar le trae hermosos recuerdos de su difunto marido, el duque de Edimburgo, sin embargo el trayecto de más de 3 horas de Windsor a Sandringham casi terminó mal.
Según fuentes del diario inglés, el vehículo que transportaba a la reina estuvo a punto de chocar con otro coche que venía en sentido contrario.
“Fue casi una colisión frontal, que fue evitada gracias a la capacidad del conductor del vehículo blanco de frenar bruscamente y detenerse a solo unos centímetros de su automóvil”, señaló un testigo, añadiendo que el auto venía a 50km por hora.
“El accidente se evitó por poco… El Range Rover de la reina debería haberse detenido en la intersección para dejar pasar el automóvil, pero no fue así aunque la reina tuvo mucha suerte”, agregó el testigo.
La distancia entre el Castillo de Windsor – donde vive la reina – y Sandringham es de 3 horas y 22 minutos en coche, aunque en otras ocasiones la monarca ha hecho el trayecto en helicóptero, lo que acorta considerablemente la distancia.