En Nuevo León siguen los hallazgos en presuntos “campos de exterminio” del crimen organizado y ahora fue en el lugar conocido como “El Tubo”, en el municipio de Hidalgo, en donde se encontraron indicios de restos óseos.
La Fiscalía General de Justicia del estado informó lo anterior y mencionó que se presume que los restos son humanos. En el lugar también se localizaron prendas de vestir.
Los cuales (restos) se han puesto pertinentemente en cadena de custodia por parte de la autoridad ministerial para mantener su calidad probatoria”, indicó la FGJNL en un comunicado.
En el lugar trabajan expertos del Instituto de Criminalística y Servicios Periciales, así como de la Comisión de Búsqueda.
Asimismo, se cuenta con el acompañamiento de colectivos de familiares de personas desaparecidas, con quienes se comparte información continuamente”, resaltó la autoridad.
El lugar se ubica en el Camino a Potrero Grande (antiguas pedreras).
Se estableció que los trabajos continuarán hasta terminar la excavación de 194 metros de profundidad, que es la medida del tubo.
Participan en la inspección elementos de la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas, Fiscalía Especializada Antisecuestros, Agencia Estatal de Investigaciones, Fuerza Civil, Comisión Nacional de Búsqueda, Comisión Local de Búsqueda y Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, entre otros.
Cabe destacar que los trabajos en el lugar iniciaron el pasado 30 de diciembre y apenas hasta ahora se reportaron hallazgos.
En Nuevo León hay otro sitio en donde las autoridades hacen actualmente inspecciones y es en un predio del municipio de Escobedo en donde ya se han localizados 12 cuerpos en fosas clandestinas.