Los visitantes comenzaron ganando el duelo pero la Fiera buscó el empate con doblete de Lucas Di Yorio
Pumas pudo tener una noche perfecta en León, pero el triunfo se les fue de las manos, pues no pudieron sostener tres goles a favor y León los terminó alcanzando (3-3); sin embargo, lo que mostró el ataque del Pedregal es alentador, aunque no así su defensa.
Si la afición de Pumas ya estaba ilusionada con su equipo sólo con los nombres de sus refuerzos y de los jugadores que ya estaban, después de ver jugar junto a tridente argentino por primera vez, la ilusión ahora es mayor; sin embargo, cuando todo era un momento de ensueño aurizul, después de ir ganando por tres goles, León los alcanzó.
Y es que a pesar del resultado, lo que Dinenno, Del Prete y Salvio mostraron en el ataque, al menos ante La Fiera, da para que su gente sueñe a lo grande.
En lo que parecía el primer triunfo felino en el torneo fue con tres goles y cada uno cortesía de los argentinos que en su primer partido juntos se lucieron, pero tambien lo hicieron en compañía del cabrerano Jorge Ruvalcaba. A los cuatro minutos el ‘9’ los puso adelante con un penalti por una supuesta mano de Paul Bellón, la cual determinó el VAR. Y mientras León se quedó con 10 hombres por la expulsión de Osvaldo Rodríguez, cuando el primer tiempo estaba por terminar, Ruvalcaba le centró a pelota a Del Prete y éste se estrenó en el futbol mexicano.
Arrancó la segunda parte, y cuando el reloj marcó los 51 minutos, llegó el turno de Eduardo Salvio. El ‘Toto’ no desaprovechó y marcó el tercero pra Pumas.
Pero el panorama de Universidad estaba por ponerse muy negro, porque su defensa se durmió y La Fiera despertó; Di Yorio y Campbell anotaron el primero y segundo gol, respectivamente para poner el marcador 2-3, pero Lucas Di Yorio lo volvió a hacer, marcó el tercero para su causa y la cueva del León era una locura ante los ojos atónitos de Pumas y su gente.
Y así acabaron ambos felinos, repartiéndose los puntos, pero mientras el empate al León le supo a gloria, para Pumas acabó sabiendo a derrota.