Diogo de Oliveira marcó para la UNAM y para el Celta de Vigo lo hizo Iago Aspas
Pumas y el Celta de Vigo quedaron empatados a uno, pero los ganadores fueron los aficionados que pese a la lluvia se mantuvieron los 90 minutos en la tribuna de CU siendo testigos de un momento histórico para Universidad.
El camino internacional de Pumas continúa y ahora tocó el turno del Celta de Vigo, y ni la lluvia que cayó intensamente todo el partido, pudo evitar que más de 20 mil aficionados disfrutarán del espectáculo que inclinaba tener en casa a un equipo español.
Y es que hace 19 años que el césped del Olímpico Universitario no era pisado por un club europeo (la última vez, el Osasuna de Javier Aguirre en agosto de 2003), por lo que sin duda la fiesta en CU el miércoles por la noche será memorable.
Ambos equipos tomaron el juego amistoso con seriedad. Eduardo Coudet mandó al campo a los mejores hombres con los que viajó a México, mientras que Andrés Lillini hizo lo mismo, aunque guardó, por ejemplo, a Gustavo del Prete, pero mantuvo a Eduardo Salvio quien justo el día de su cumpleaños debutó en CU y en juego internacional.
Pero a pesar de las expectativas que ha causado el tridente auriazul, el gol de Pumas vino por el que parece ser el delantero ‘olvidado’: Diogo de Oliveira, que a los 22 minutos de juego y de cabeza, como ya es su sello, marcó el tanto.
El tiempo avanzó y la lluvia no daba tregua, pero no por ello ambos equipos seguían peleando y a los visitantes les dio frutos porque ya en la recta final de la primera parte Iago Aspas, seleccionado español, anotó el gol de empate.
Para la segunda parte ambos entrenadores hicieron cambios. Lillini debutó al portero Gil Alcalá, mientras que el ‘Chacho’ sacó de cambio a Aspas, quien se fue entre aplausos de los aficionados tanto de felinos como de los pocos celestes que estaban en CU.
Ya luego Pumas tuvo varias oportunidades de ponerse adelante en el marcador, pero no concretó. Y aunque el Celta también hizo lo suyo, Gil Alcalá tuvo un buen debut y hasta fue aplaudido por su gente.
Al final ambos equipos intercambiaron camisetas, recibieron la ovación de la gente y terminaron con la satisfacción de cómo ambas escuadras dijeron, darle un buen espectáculo a los espectadores.