Tres días después de la gresca entre Querétaro y Atlas, del pasado 5 de marzo en el Estadio Corregidora, en el Senado de la República Mexicana se publicó una iniciativa en la que se propone: “restringir el consumo del alcohol en aquellos actos deportivos a los cuales asistan menores de edad”, como son los estadios de la Liga MX.
La iniciativa que fue consultada por ESPN y presentada por la Senadora Lilia Margarita Valdez Martínez, el 8 de marzo del 2022 y se encuentra en revisión por las “Comisiones Unidas de Salud” y “Estudios Legislativos”, con el estatus de pendiente y podría ser aprobada o rechazada en el próximo período legislativo.
En el documento se exponen como ejemplos el Clásico tapatío del 2021, el Clásico Regio en la reapertura del Estadio Universitario, y el dueo entre Puebla y Pumas, además de un Pachuca contra Santos, un Atlas contra Mazatlán FC y el juego entre Querétaro y Atlas, que dejó un saldo de 26 heridos y una sanción para el Estadio Corregidora de un año sin público.
“Lo ocurrido en el Estadio la Corregidora de Querétaro fue calificado como el día más negro en la historia del futbol mexicano sobre todo por la brutalidad y la criminalidad sucedida”, se lee en el documento.
En el documento se propone “a) Limitar los horarios para consumo del alcohol, y a.1) Restringir el consumo del alcohol en aquellos actos deportivos, a los cuales asistan menores de edad. V. Regular la venta de alcohol en espacios destinados al acceso público para el desarrollo de actividades deportivas. 187 Bis 2. Queda prohibida la promoción, publicidad y venta de los productos con contenido alcohólico en los espacios destinados al acceso público para el desarrollo de actividades deportivas a los cuales asistan menores de edad”, pero no se menciona el prohibir definitivamente la venta de estos productos en los recintos dedicados al deporte.
Por ahora, la iniciativa se encuentra en “revisión” y se suma a otras que han surgido a raíz de la gresca entre Querétaro y Atlas, del pasado 5 de marzo, como la de evitar que personas con antecedentes penales ingresen a los estadios, todas aún sin ser aprobadas y con estatus de “pendiente”.