El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto mediante el cual se faculta a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para apoyar al Gobierno de Nuevo León con el objetivo de garantizar el acceso al agua potable.
En la conferencia matutina en Palacio Nacional, López Obrador apuntó que con estas acciones se garantizará el agua potable a la ciudadanía de dicha entidad entre ocho y 10 años.
“Se van a tomar medidas adicionales y voy a firmar un decreto con ese propósito, es resolver el fondo a mediano y a largo plazo el problema, reforzar acciones de inmediato. Quizá siendo estrictos en nuestra valoración, las soluciones que nosotros estamos proponiendo y se van a llevar a cabo nos van a permitir seguir trabajando hacia adelante”, puntualizó.
“Vamos a poder garantizar agua ocho o 10 años hacia adelante. Nos comprometemos a que antes de que termine este Gobierno se tenga abasto para ocho o 10 años hacia adelante”, agregó.
López Obrador aseguró que resolver la crisis hídrica en el estado va a llevar tiempo, pese a que ya iniciaron las primeras lluvias en el estado.
“Va a llevarse más tiempo (solucionar la crisis hídrica), aún cuando ya empezó a llover, va a llevar más tiempo todavía. Y se está afectando más a la población pobre, los que no tienen líneas de conducción de agua, no tienen infraestructura y hay que llevales agua en pipas”, dijo.
Entre las acciones se encuentran: financiamiento del acueducto El Cuchillo 1; inversión en la presa La Libertad, que ara 2023 tendrá recursos por mil 118.5 millones de pesos; acuerdos con la zona agrícola citrícola del Canal Chapotal, para aportar hasta mil litros por segundo de agua.
También la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aportará 100 pipas de agua, adicionales a las 48, como parte del programa DN III-E; perforación de pozos emergentes para incrementar volúmenes de agua, además de apoyos de programas federalizados por 385.6 millones de pesos.
Monterrey, la capital neoleonesa y la segunda ciudad más poblada de México, vive desde febrero pasado la escasez de agua lo que ha dejado a la urbe de cerca de cinco millones de habitantes sin una gota de líquido durante la mayor parte del día.
El estado de Nuevo León no enfrentaba una situación similar en al menos dos décadas e incluso su situación es la peor en su historia.
Ante la falta de agua, el Gobierno estatal implementó medidas como cortes de agua de 18 horas al día para regular el consumo, además del reparto de agua con pipas y la instalación de cisternas en los sectores más afectados con el desabasto.