El presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó este sábado que la operación especial rusa en Ucrania fue una decisión dura, pero necesaria para poner fin al sufrimiento de la población de Donbass.
De acuerdo con el mandatario ruso, tras el golpe de Estado en Ucrania en 2014, apoyado por Occidente, Kiev no se mostró dispuesto a solucionar la situación por la vía diplomática y la población de Donbass se convirtió en objetivo de «operaciones militares punitivas».
«La gente en Donbass no son perros callejeros: entre 13.000 y 14.000 fueron asesinados a lo largo de estos años. Más de 500 niños fueron matados o mutilados», lamentó. «Pero lo más difícil de tolerar es que el llamado Occidente civilizado prefiere no darse cuenta de esto», criticó Putin.
Al mismo tiempo, el presidente ruso describió como «correcta» la decisión de no limitar la operación especial al territorio de Donbass, dado que las fuerzas ucranianas habrían seguido recibiendo recursos militares para los ataques.
«Tendríamos que luchar contra la OTAN»
En este contexto, el presidente ruso subrayó la amenaza que representa para el país la posible adhesión de Ucrania a la OTAN. «Realizan operaciones militares en Donbass y pueden también meterse en Crimea. Y entonces nosotros tendríamos que luchar contra toda la organización de la OTAN«, explicó.
Por otra parte, recordó que Ucrania empezó a expresar su interés en renunciar a su estatus no nuclear y recalcó que Rusia no podía ignorar tales declaraciones. «Desde ese mismo instante [cuando Ucrania se convierta en una potencia nuclear], el destino de Rusia va a ser completamente diferente, porque entonces nuestros opositores estratégicos […] justo aquí nos tendrán a punta de pistola nuclear«, dijo el presidente ruso.
«Si ellos [las autoridades ucranianas] continúan haciendo lo que hacen —ya lo he dicho antes— ponen en duda el futuro de la organización política de Ucrania», afirmó. El presidente ruso comentó también las exigencias de su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, de crear una zona de exclusión aérea en Ucrania. «Consideraríamos cualquier movimiento en esta dirección como participación en un conflicto armado«, enfatizó.
El mandatario también explicó que el objetivo principal de la operación rusa es proteger a los residentes de Donbass «a través de la desmilitarización y la desnazificación de Ucrania» para garantizar su estatus neutral. Respecto a la desnazificación, Putin detalló que, si bien los radicales también existen en el territorio de Rusia, la situación de Ucrania es más complicada por el hecho de que estos grupos están presentes en las esferas del Gobierno.
La operación «sigue según lo previsto»
En este contexto, precisó que Moscú podrá lograr los objetivos previstos empleando a los elementos activos de las Fuerzas Armadas de Rusia y aseguró que actualmente casi se completó la tarea de destrucción de la infraestructura militar ucraniana.
Además, denunció los intentos de manipular la opinión publica en el territorio de Rusia con informaciones falsas sobre la situación en el país y las acciones de sus Fuerzas Armadas. Pese a estas noticias falsas, el mandatario afirmó que la operación «sigue según lo previsto».
Por otra parte, Putin comparó las sanciones contra Rusia con una «declaración de guerra», al tiempo que expresó su confianza en que el país podrá mitigar sus efectos.