Las autoridades estadounidenses recomendaron este viernes la liberación y repatriación a Arabia Saudita de Mohammed al-Qahtani, recluido en el centro de detención de Guantánamo, apelando a su «estado mental comprometido».
Al-Qahtani, sospechoso de ser el presunto ‘secuestrador número 20’ en los atentados del 11 de septiembre de 2001, lleva recluido en la polémica prisión por casi dos décadas, pese a que en 2008 el Gobierno estadounidense retiró los cargos en su contra.
Según informa Reuters, la confesión de Al-Qahtani de que planeó un ataque podría ser una evidencia contaminada, dado que el saudita había sido sometido a ahogamiento simulado, una de las técnicas de interrogatorio ampliamente criticada como tortura. «Torturábamos a Qahtani«, confesó en aquel entonces a The Washington Post Susan J. Crawford, responsable de convocar las comisiones militares en Guantánamo. «Su tratamiento correspondía a la definición jurídica de tortura», agregó.
«El Panel de Revisión Periódica, por consenso, determinó que la detención continua del recluso en virtud del derecho de la guerra ya no es necesaria para la protección de una amenaza continua y significativa para la seguridad de EE.UU.», reza la nueva resolución del órgano asesor, encargado del traslado o liberación de los presos de Guantánamo.
El panel estadounidense subrayó que el recluso «representa cierta amenaza en vista de sus actividades y asociaciones previas», aunque «puede ser mitigada adecuadamente», por lo que considera a Al-Qahtani apto para el traslado a Arabia Saudita para someterse un programa de rehabilitación.
Al mismo tiempo, las autoridades señalaron que el recluso podrá recibir la atención integral de salud mental en su país natal, así como el apoyo de su familia. No obstante, deberá permanecer bajo supervisión y sujeto a restricciones de viajes tras completarse su programa.