Un grupo de paseños dejó en claro su oposición a la ampliación de la autopista Interestatal 10 (I-10) en el área del Centro de la Ciudad y sus alrededores.
El Concejo Municipal de El Paso votó el martes seis a uno a favor de enviar una resolución al Departamento de Transporte de Texas (TxDOT) para considerar un diseño alternativo para el Proyecto “Reimaginar la Interestatal 10”.
Como parte del proyecto, el TxDOT planea ampliar la I-10 y agregar carreteras secundarias de alta velocidad y alto volumen a través del área central y el centro de El Paso.
El costo de la propuesta de expansión sería de 787 millones, según TxDOT.
Sin embargo, no toda la población esta a favor de esta expansión, sino que rechazan la idea de utilizar ese presupuesto para una “infraestructura innecesaria”.
Scott White, director de políticas de la Coalición de peatones y ciclistas de Velo Paso y miembro del Comité Directivo de Freeways for the People, afirmó estas preocupaciones y le pidió a TXDOT que considere velocidades más lentas, carriles más angostos y una mejor conectividad a los vecindarios a ambos lados de la I-10.
“Especialmente porque estos objetivos están codificados en los planes de varias ciudades”, dijo White.
“Este es un importante paso adelante en el proceso público de Reimaginar la I-10 y nuestro sistema de transporte, para garantizar que el dinero de nuestros impuestos se gaste donde realmente se necesita para abordar la seguridad vial y de las calles, las condiciones de la infraestructura y para apoyar el movimiento eficiente de personas que caminan, andan en bicicleta, toman el transporte público o manejan”, dijo White.
Sin embargo, nuestros dólares de transporte a menudo se gastan en carreteras, en lugar de las calles donde trabajamos y vivimos. Como resultado, los baches dañan nuestros vehículos, la señalización de los carriles se desvanece y el mantenimiento de rutina en nuestras calles y caminos sigue siendo diferido”, añadió.
Agregoo que TxDOT se enfoca “en agregar capacidad innecesaria y millas de carril, lo que con demasiada frecuencia crea más congestión en el proceso”.
“Por ejemplo, por los 100 millones gastados en el proyecto I-10 Connect, los habitantes de El Paso ahora están lidiando con una congestión aún peor en el acceso a Juárez”, dijo White.
“Esta congestión adicional bloquea el acceso tanto al puente como a la carretera fronteriza, que es lo contrario de lo que nos dijeron que sucedería”, agregó.
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Daña el ambiente
El miembro del Freeways for the People dijo que, además, el proyecto ha empeorado aún más la injusticia ambiental que sufren los residentes cercanos.
“El aumento de los niveles de ruido, vibraciones que están agrietando los cimientos y las emisiones de los vehículos que son una fuente importante de contaminación atmosférica tóxica.
Como resultado, las personas que viven trabajan o asisten a la escuela en las proximidades de nuestras carreteras sufren y continúan sufriendo numerosos impactos negativos en la salud. Este es el triste legado y el futuro de estas comunidades” aseveró.
“Debido a la nueva postura de la Ciudad sobre este asunto, aplaudimos el compromiso de la Ciudad de velar por los intereses de estos vecindarios y planeamos hacerlos cumplir su palabra. Si bien algunos se enfocan en un parque cubierto, nosotros nos enfocamos en toda la parte central de El Paso que se verá afectada por el proyecto I-10 de TxDOT, especialmente los miles de residentes que viven cerca de la autopista”, señaló.
White dijo que los colectivos seguirán “luchando contra esta expansión innecesaria” ya que las peligrosas carreteras secundarias dañan los vecindarios, la contaminación del aire y el ruido, las vibraciones son innecesarias”, hizo hincapié.
White finalizoo: “La resolución deja en claro que la Ciudad está preocupada, al igual que nosotros, por los posibles impactos negativos de ampliar la I-10 y convertir las carreteras adyacentes en carreteras secundarias de alta velocidad y gran volumen. Este proyecto tiene el potencial de dañar aún más a nuestra ciudad o de crear la base para un sistema de transporte mejor, más sostenible y más seguro. Los resultados de lo que construya TxDOT darán forma a nuestra ciudad durante los próximos cincuenta años, si no más, por lo tanto, nos debemos a nosotros mismos y a las generaciones futuras hacer esto bien”, finalizó.