Un suplemento a base de hierbas conocido como Kratom se ha popularizado los últimos años. La Administración de Control de Drogas (DEA) de los Estados Unidos del Sector El Paso advierte a la comunidad los riesgos de esta sustancia no controlada.
De acuerdo con Carlos Briano, portavoz de la DEA, este producto produce efectos similares a los de los opiáceos y su popularidad se debe a su potencial adictivo, accesibilidad y estatus legal.
El acceso también se facilita a través de compras en línea y numerosas tiendas. En El Paso se puede conseguir de manera legal en algunos establecimientos de conveniencia como suplemento alimenticio.
Según la DEA, Kratom es un árbol tropical originario del Sudeste asiático y el consumo de sus hojas produce tanto efectos estimulantes (en dosis bajas) como efectos sedantes (en dosis altas), y puede conducir a síntomas psicóticos, y dependencia psicológica y fisiológica.
“Las hojas de Kratom contienen dos ingredientes psicoactivos principales (mitraginina y 7-hidroximitraginina). Estas hojas se trituran y luego se fuman, se preparan con té o se colocan en cápsulas de gel. El Kratom tiene una larga historia de uso en el Sudeste asiático, donde se conoce comúnmente como thang, kakuam, thom, ketum y biak”, dice un informe de la DEA.
En los Estados Unidos, el consumo de Kratom ha aumentado notablemente en los últimos años y El Paso no es la excepción.
Según los funcionarios, este suplemento es de fácil manipulación y puede ingerirse de diversas formas, lo que ha provocado que sea un potencial riesgo de abuso de la sustancia.
“Principalmente por ingestión oral en forma de tabletas o cápsulas. Las hojas de Kratom también pueden secarse o pulverizarse e ingerirse como té, incluso la hoja se puede masticar”, informaron.
“Se han reportado varios casos de psicosis resultantes del uso de Kratom donde los individuos adictos exhibieron síntomas de psicosis incluyendo alucinaciones, delirio y confusión”, se añade.
La DEA dice que los efectos del Kratom en el cuerpo incluyen náuseas, picazón, sudoración, sequedad de boca, estreñimiento, aumento de la orina, taquicardia, vómitos, somnolencia y pérdida del apetito.
“Los usuarios de Kratom también han experimentado anorexia, pérdida de peso, insomnio, hepatotoxicidad, convulsiones y alucinaciones”, dice el informe.
Aunque el Kratom no está controlado por la Ley de Sustancias Controladas, puede haber algunas regulaciones estatales o prohibiciones contra la posesión y el uso.
“La FDA no ha aprobado Kratom para ningún uso médico. Además, la DEA ha incluido al Kratom como una droga y sustancia química de interés”, informaron.
Briano pidió a los padres de familia de esta comunidad estar atentos con sus hijos y mantener el diálogo abierto con sus seres queridos para evitar el consumo de esta nueva droga legal.
“Mi consejo es que tomen esta oportunidad de información para tener una conversación con sus seres queridos. Tomen ventaja para abrir las puertas de la comunicación con toda persona sobre los peligros de tomar cualquier cosa y cualquier medicamento no recetado.
“Cuando usted compra una sustancia en la calle o por redes sociales, incluso en una tienda, hay bastantes peligros y éste es un ejemplo. Tome la oportunidad de hablar de esta sustancia, no sólo de ésta sino de todas las que hablamos en la DEA”, finalizó.