Investigadores del Instituto de Estudios Altoaragoneses y de las universidades de Zaragoza, Burdeos, Politécnica de Madrid y Salamanca publicaron recientemente un estudio en el que detallan el hallazgo de una antigua ciudad imperial romana en la localidad española de Artieda, en la vertiente sur de los Pirineos.
Los trabajos arqueológicos en la zona se remontan al año 2018, cuando el Ayuntamiento de Artieda solicitó asistencia a la Universidad de Zaragoza para estudiar unos vestigios dispersos en torno a la ermita de San Pedro y conocidos como El Forau de la Tuta.
Tres años después, los expertos han podido comprobar que estos vestigios constituyen en realidad un único conjunto arqueológico de grandes dimensiones, donde entre los siglos I y II d.C. se alzó una gran urbe romana que contaba con templos, termas e incluso un avanzado sistema de alcantarillado. Pese a su evidentemente importancia, el nombre de esta ciudad no parece haberse conservado en ningún documento histórico.
El análisis de cuatro lápidas del yacimiento, que se conservaban en el Museo Diocesano de Jaca y en colecciones privadas de Artieda, llevó a la conclusión de que pertenecían a una “necrópolis importante y que se mantuvo hasta el cambio de era”.
Los arqueólogos constataron que más tarde, entre los siglos IX y XIII, la zona estuvo ocupada por un asentamiento campesino de tipo villa o aldea altomedieval.
Las excavaciones en El Forau de la Tuta y sus alrededores continúan, pues los expertos sospechan que todavía quedan allí muchos más secretos por descubrir.