La exestrella de la extinta serie Empire, Jussie Smollett, de 39 años, fue sentenciada a 150 días de prisión por mentirle a la policía de Chicago, alegando que había sido víctima de un ataque racista, cuando en 2019 fue agredido por dos hombres, quienes luego confirmaron que habían sido contratados por el propio actor.
El juez que llevó el caso, James Linn, dictó sentencia, pero sin antes criticar la postura del actor, calificándolo de ‘arrogante, egoísta, narcisista’, que ‘perjudicó a víctimas reales de crímenes de odio’.
“Las víctimas siempre son reacias a presentarse, y Jussie no les hizo ningún favor. Mintió y mintió repetidamente sobre el incidente”, dijo Linn.
Al momento de escuchar su sentencia, el actor estaba muy enojado y le dijo al juez que si algo le pasara en prisión, no sería un suicidio.
La abuela de Jussie, de 92 años, pidió clemencia para su nieto, diciendo que fue víctima de los medios y llamó a su nieto un “guerrero de la justicia”.
Nerviosa, la señora le pidió al juez que si enviara a Jussie a prisión, la enviara junto con él.
Además de 150 días tras las rejas, Smollett fue sentenciado a 30 meses de libertad condicional, tendrá que devolver US$ 120,106 de los cargos de la demanda a la Ciudad de Chicago y pagará una multa de US$ 25,000.
Finalmente, el juez James Linn declaró que a Jussie no lo motivaba el dinero, y que lo hizo porque ansiaba llamar la atención y pensó que podía elevar su perfil explorando el movimiento de justicia social en los Estados Unidos.
El juez dejó en claro que no estaba sentenciando a Jussie para satisfacer a la opinión pública, sino por lo que hizo.